Fue el de Palop sobre todo un homenaje para todas aquellas generaciones, como la de Luis Miguel Arconada, que se quedaron a las puertas de un sueño, con la miel en los labios. Fue también una reivindicación para aquellos jugadores que ilusionaron a todo un país, en la Eurocopa de 1984, pero que no pudieron hacer realidad lo que tantas veces se había buscado.

Cuando Palop, gran admirador del portero de la Real Sociedad, se dirigió con el resto de compañeros a recibir la medalla de oro y la copa de campeones no lo dudó dos veces y lo hizo vistiendo la camiseta que lució Arconada en la final de la Eurocopa de 1984, que España perdió 2-0 con los anfitriones, los franceses.

La ironía de la historia hacía que el hombre que sentenció a la Selección en el 84 en Parque de los Príncipes, Michel Platini, entregaba a Iker Casillas en Viena la copa de campeones en 2008. Pero allí estaba Palop para recordar que en esa lista ilustre de grandes porteros españoles (de Zamora a Casillas pasando por Ramallets, Iribar y tantos más) también se encontraba Arconada.

"Me he puesto la camiseta para celebrarlo como homenaje a Arconada, porque se le recuerda mucho por un fallo que tuvo en su momento, pero hay que recordarle más por lo gran portero que era y lo que nos ha enseñado a nuestra generación". Así explicaba Palop su gesto nada más acabar aquella gran cita de 2008.

Luego, ya más tranquilo desgranaba cuáles fueron sus sentimientos aquella noche en al que decidió entrar en los vestuarios del Ernst Happel de Viena y enfundarse la camiserta verde y negra que llevara en su día Arconada.

En primer lugar el gesto resumía una frustración colectiva de los españoles y sobre todo de los niños que vieron aquella final: "Recuerdo cómo en las semifinales de la EURO '84 ante Dinamarca, Arconada fue el que aseguró el pase a la final de España con sus paradas. Así que realmente esperaba ver a Arconada levantar ese trofeo. Pensé que con la racha que llevaba España podía proclamarse campeona, pero sabía que Francia era una selección muy fuerte y que no sería fácil. Esas esperanzas que tenía de verles levantar el trofeo terminaron con esa derrota en París. Efectivamente esa final es recordada por el error que cometió Arconada. Yo empecé a llorar. Era un niño de diez años por entonces, pero lo recuerdo perfectamente".

Andrés Palop: "Tuve la oportunidad de darle un pequeño homenaje a Arconada cuando gané la final de la EURO, como gesto para dejar las cosas claras. No se puede juzgar a una persona por un solo error… hay que mirar toda su carrera, sus títulos y sus logros. Arconada hizo mucho más que ese error. Así que por eso me acordé de él".

En los años 80 muchos niños querían ser porteros debido a un hombre como Arconada, prototipo de la elegancia bajo los palos: "Arconada es recordado por ese error. Y eso es algo que siempre me ha molestado. Tuve la oportunidad de darle un pequeño homenaje a Arconada cuando gané la final de la EURO, como gesto para dejar las cosas claras. No se puede juzgar a una persona por un solo error… hay que mirar toda su carrera, sus títulos y sus logros. Arconada hizo mucho más que ese error. Así que por eso me acordé de él".

Pero, ¿cómo surgió la idea de hacerle el homenaje? Palop recordaba que "había pensado en mandarle un mensaje a Arconada, para que fuera recordado como el gran portero que es, un guardameta que transmite muchos valores y esperanza a los más jóvenes. Lo hablaba con la prensa de Sevilla y allí había un periodista que además era un gran seguidor de Arconada y muy amigo suyo. Tenía una camiseta de él en casa. Así que entre nosotros surgió una buena amistad basada en Arconada. Después, en la EURO, pensamos que deberíamos hacer algo especial en su honor. Tras las semifinales le llamé y le dije que si ganábamos la final me gustaría ponerme la camiseta de Arconada y si me la podía dejar. El periodista estaba encantado ya que él también creía que se lo merecía así que por mediación de unos amigos de Sevilla me la trajeron al hotel y la guardé en mi bolsa. Después del pitido final fui a buscarle y me la puse. Por eso hay fotos con su camiseta cuando levantamos el trofeo".

Lo más llamativo de todo fue que Palop no sabía que en aquel estadio vienés, viendo la final estaba el propio Arconada: "Cuando llegó el momento de recoger mi medalla, hablé con el Presidente de la UEFA Michel Platini para decirle que llevaba una camiseta en honor a Arconada. Desde el momento que Platini le marcó un gol a Luis, siempre quise tener un pequeño homenaje con él, porque me pareció que debió ganar el trofeo. Platini me dijo que habían invitado a Arconada para la final y que estaba en el estadio. Estoy seguro de que se mostró encantado con este gesto. Con toda la humildad del mundo, creo que la imagen de Arconada ha sido mucho más positiva. Arconada es ahora más conocido por el trabajo que hizo para inspirar a nuestra generación que por un error que tuvo".

Si emocionante fue para todos aquellos españoles que vieron sus sueños por los suelos en 1984 mucho más lo fue para el protagonista indirecto de todo aquello, el propio Arconada quien confesaba que no podía creer lo que estaba viendo: "Aluciné. Me dijeron, mira, mira. Fue una alegría que con esa camiseta pudiera recoger una copa que no pude conseguir yo hace tantos años".

Ahora que Palop dice adiós al fútbol en activo, muchas cosas van a quedar en el recuerdo de este gran portero (quién no recuerda sus paradas en la tanda de penaltis de la final de la Uefa ante el Espanyol), luchador (como desmuestra su gol ante el Shakhtar Donetsk en los octavos de final de la Copa de la Uefa) y gran persona, condición que gestos como el homanaje a Arconada no hacen sino ratificarlo.