Consciente de la importancia de la cita, la Selección española femenina saltó al césped del Lansdowne Stadium de Ottawa con una vocación claramente ofensiva. En los dos primeros minutos, Natalia Pablos tuvo dos ocasiones claras para adelantar al conjunto nacional gracias a otras tantas internadas por banda de Marta Corredera y Alexia Putellas.

El trabajo tiene sus frutos y la encargada de recogerlos fue la capitana del equipo. Vero Boquete conectó un gran disparo con la izquierda para adelantar a España a la media hora de partido y acercar el sueño de un país despierto y volcado con su Selección femenina.

El partido siguió con el mismo guión hasta el intermedio, España controlando y buscando el segundo tanto. Pero tras el paso por los vestuarios la República de Corea reaccionó y logró empatar por medio de su capitana Sohyun Cho en el minuto 53'.

El combinado nacional se lanzó al ataque con cambios ofensivos pero el gol no llegó. Sin embargo, fueron las coreanas las que por medio de Kim Sooyun se adelantaron en el marcador con quince minutos por disputarse.

Los últimos minutos fueron de infructuoso acoso español. Un sueño se acaba, pero siempre quedará otro por llegar. La Selección femenina solo ha dado el primer paso, queda por delante un gran porvenir.

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