Dani Romero, casi 300 kilómetros por una pasión
El jugador de la Selección Andaluza sub-14 realiza el trayecto Córdoba-Sevilla todos los días para ir a entrenar con su club
Dani Romero juega en el Sevilla FC. Hasta aquí una historia normal, de no ser por el sacrificio que tiene que hacer para desplazarse. Y es que desde alevines Dani recorre unos 140 kilómetros de ida (y otros tantos de vuelta) para poder ejercitarse con su club, realizando el trayecto Córdoba-Sevilla.
Un autobús le recoge en casa y no regresa hasta las diez de la noche. Un esfuerzo que no haría de no ser porque desarrolla allí su pasión: el fútbol. Pero Dani ni viaja solo. "Dónde él vaya, vamos todos", nos cuenta su primo, Miguel Ángel Ruiz, que se desplazó para verlo jugar con la Selección Andaluza sub-14 en los Campeonatos Nacionales de Selecciones Autonómicas.
Pero si hay alguien que le acompaña a cada partido desde los tres años es su abuelo, Luis Romero, que no se pierde ni una cita sin importar la distancia: "Mientras pueda voy a estar a su lado", reconoce mientras enumera los lugares a los que ha ido para apoyarle. Y es que a pesar del sacrificio de hacer un viaje tan largo para jugar al fútbol, Dani lo tiene claro: "Por un sueño se hace lo que haga falta".