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07 Abril 2023

El paseo por la playa de la Malvarrosa que unió a dos amigos en el mundo del arbitraje

Quién iba a imaginar, cuando ambos compartían pupitre en el I.E.S. Isabel de Villena de Valencia y les apasionaba el fútbol, que con el paso de los años iban a ser árbitros. Francesc Bañó y José Miguel Carballa fueron los elegidos para dirigir las finales de la Fase Oro del 'Campeonato de España de Selecciones Autonómicas' en las categorías Sub 14 y Sub-16.

Quién iba a imaginar, cuando ambos compartían pupitre en el I.E.S. Isabel de Villena de Valencia y les apasionaba el fútbol, que con el paso de los años iban a ser árbitros. A Francesc Bañó y José Miguel Carballa les une una gran amistad desde que se conocieron en la zona de Poblats Marítims de Valencia, desde su infancia han vivido muchas experiencias juntos, pero un paseo por la playa de la Malvarrosa desencadenó en unir su pasión por el arbitraje. Los dos fueron los encargados de dirigir las finales de la Fase Oro del 'Campeonato de España de Selecciones Autonómicas' en las categorías Sub 14 y Sub-16.

Ahora ya llevan 17 y 16 temporadas como árbitros, en la actualidad son colegiados de Tercera Federación y asistentes de Segunda Federación, pero el paso de los años no impide que nunca vayan a olvidar el momento en el que Francesc convenció a José Miguel para iniciarse en el arbitraje. "Recuerdo que dando un paseo por la playa de la Malvarrosa se lo comenté porque no sabía hacia dónde ir a nivel laboral, le hablé de esta salida, le gustó y se animó. Tardó dos días en apuntarse al curso. Al principio choca un poquito, desde fuera quizá la imagen que se tiene del árbitro es otra, pero vino a verme un par de partidos y vio que del arbitraje se disfruta también, no sólo jugando, también arbitrando y mucho en cada partido", indica Francesc.

Ese momento significó un punto de inflexión que tampoco olvidará José Miguel: "Somos amigos desde pequeños, hemos ido juntos al colegio, jugamos juntos y al finalizar nuestra etapa de futbolista, dando un paseo una tarde me contó las ventajas que tenía. Era una forma de seguir ligados al fútbol, gracias a él me inicié en este mundo y no me arrepiento, ha sido mi mentor y todo lo que sé lo he aprendido de él".

Ambos coinciden en que la figura del colegiado es la de un "deportista de élite. Quien lo vive desde dentro sabe que ser árbitro ya no es estar preparado técnicamente, físicamente requiere de un esfuerzo diario y constante a la par de un futbolista. Si ponemos en una balanza lo positivo y lo negativo, lo positivo ganaría de lejos, el arbitraje tiene muchísimas cosas buenas".

Han compartido partidos, experiencias, travesuras en su infancia, momentos de alegría, otros no tanto que aprovecharon para su aprendizaje y, desde el pasado fin de semana, ser los elegidos para arbitrar las dos finales de la Fase Oro del 'Campeonato de España de Selecciones Autonómicas' Sub-14 y Sub-16. "Esta es otra experiencia más que añadir a nuestra trayectoria y estamos encantadísimos", concluye José Miguel.