La Primera Iberdrola de Fútbol Sala se decidirá en Burela
El Pescados Rubén Burela ganó en cancha del Atlético Navalcarnero y jugará el miércoles como local el partido decisivo
El título de la Primera Iberdrola Fútbol Sala se decidirá el próximo miércoles en Burela. El equipo gallego recuperó el factor cancha al vencer en Navalcarnero y jugará ante su público el partido decisivo. La rivalidad entre los dos grandes del fútbol sala español se decantó esta vez para las gallegas en un partido ajustadísimo en el que las madrileñas no llegaron a ponerse por delante en ningún momento.
De inicio fue el Pescados Rubén Burela el que mandó en el encuentro. Suyo fue el balón y suyas las mejores ocasiones en el arranque de la primera mitad. Cami, con un tiro al palo, dio el primer aviso a los seis minutos y, a los nueve, Emilly hacía el 0-1 tras un pase de Dany. Un tanto que hizo que Sergio Bretón tuviese que parar el partido con un tiempo muerto que dio sus frutos.
Tras el minuto de receso, las madrileñas fueron adelantando líneas y siendo más el equipo que quería su técnico. La faltaba traducirlo en goles. Caridad, con dos paradones a Irene Córdoba (sobre todo el segundo en el arranque de la segunda parte), evitó que la igualado llegase hasta el minuto 27, cuando Becha marcó en el segundo palo tras un saque de banda de Ari.
A las gallegas les costaba encontrarse cómodas ante un rival que insistía en cancha contraria. Aun así, tiró de calidad de sus mejores jugadoras para volverse a poner por delante. Emilly se sacó un potente disparo que Marta Balbuena despejó, pero sin poder evitar que el balón llegase a Patricia, que hizo el 1-2. Quedaban más de seis minutos y al Futsi le tocaba remar contracorriente una vez más.
Y lo intentaron de diversas formas, chocando ante una rocosa defensa gallega. Y cuando optaron con el juego de cinco lo acabaron pagando en una pérdida que Noelia Montoro convirtió en el 1-3 cuando sólo quedaban 73 segundos para el final. Irene Samper, poco después, puso la puntilla con el cuarto. El 2-4 de Ari, a 23 segundos del final, llegó demasiado tarde para las madrileñas.