España confirmó una notable progresión en su juego ante
Inglaterra, inferior a una Roja que empieza a ilusionarse con poder hacer algo importante el próximo verano. Las sensaciones volvieron a ser positivas y, pese a la falta de acierto de sus delanteros, supo llevarse el partido con goles de
Mario Gaspar y Cazorla. (...)
Inglaterra ha pasado de las ruinas a las obras, pero aún no es
España. De su lado estuvieron una firmeza defensiva que ha cultivado poco en los últimos tiempos, una buena ocupación del campo y
Sterling, pequeño diablo con velocidad, desmarque y una gran amplitud de miras en el juego. El resto fue de la
Selección, que a ratos pareció ensimismada con la pelota y que se aturdió un rato por la lesión de
Thiago, el ilusionista, el gran candidato al principado de
Xavi, pero que tuvo el partido en la mochila. (...)
España no se tomó esta vez como un trámite un amistoso el partido ante
Inglaterra. Es decir, que no desconectó como ante
Francia,
Alemania u
Holanda. En Alicante, la Roja, hizo un partido muy serio, consciente que con la
clasificación para la
Eurocopa en el bolsillo, ha llegado el momento de demostrarle al resto de selecciones que esta España va en serio, que va a ir a Francia a defender el título logrado en
2012 en
Kiev. (...)
Dos goles marcados por
Mario y
Cazorla truncaron en Alicante la racha favorable de
Inglaterra y dieron una victoria merecida a la
selección española, que jugó mejor que la inglesa durante casi todo el encuentro, especialmente en la segunda mitad. (...)
Un escorzo imposible de
Mario Gaspar, lateral derecho del
Villarreal que lleva dos goles en sus dos partidos con
España, permitió a la selección abrir el marcador, cerrado después por
Cazorla, y darse por fin la alegría de ganar a una selección con cara y ojos. Tras el Mundial, su balance ante
Francia, Alemania y Holanda era de tres derrotas y ningún gol a favor. Un desastre. Inglaterra no está hoy, y menos llena de lesiones, para incrustarse en ese grupo, pero al menos mantiene el nombre, y para esta España de entreguerras una victoria así revitaliza, aunque al rival sólo le quede la tradición. (...)
Un cero a cero suelen ser dos bostezos. Casi lo fue en
Alicante hasta el tramo final, de no ser por una oda de
Mario, un chico del Villarreal que le ha cogido gusto a lo de golear con la selección -dos partidos, dos goles- y
Cazorla tras la mejor trenza del equipo en toda la noche. Ambos animaron el cotarro y rescataron el partido que iba para la nadería. Un guiño merecido para
España, que al menos puso más arte y empeño que
Inglaterra, que aun en estas fechas estuvo de veraneo por Levante. Tampoco le da para mucho más, hace siglos que solo deslumbra su escudo, la mística. (...)