España llegaba al Tri Lilije Hall de Eslovenia con la intención de proclamarse líder de su grupo en solitario, pero delante tendría al rival más peligroso de los tres con los que quedó emparejada. El encuentro comenzó calcado al que vivimos en Las Rozas. Los de Horvat esperaban atrás, planteaban una defensa férrea y esperaban su oportunidad para salir a la contra.

España comenzaba avisando con dos ocasiones de Raúl Gómez, estrellándose una de ellas contra la cruceta de la portería. Chino tenía otras dos: una tras un saque de falta y otra desde el medio de la pista que no cogía desprevenido a Bratic. Minutos después, el peligro lo traería Vrhovec, el único integrante del cuadro esloveno que no fue convocado para el duelo de ida. El veterano jugador probaba suerte por partida doble, sacando un disparo potente con dada pierna. Juanjo se veía obligado a emplearse a fondo para desbaratar ambas ocasiones.

Los últimos compases de la primera mitad se le hicieron cómodos a Eslovenia, ya que pudo jugar a lo que quería, aprovechando las pérdidas para salir como rayos. Primero fallaba Fetic, luego Juanjo arriesgaba saliendo al borde del área para rectificar una pérdida peligrosa, pero los eslovenos acabarían perforando la red. Una parada de Bratic se convertía en un contraataque de libro que acababa en los pies de Hozjan para culminar con un disparo cruzado a la base del palo ante el que nada podía hacer el guardameta español. Llegaba el descanso y tocaba remar a contracorriente.

La charla de Fede Vidal en vestuarios surtió efecto y España volvía a hacerse con las riendas del partido. Avisaba Martel desde el suelo, pero sería Chino el que equilibraría la balanza a los pocos minutos de la reanudación. El jugador de Viña Albali Valdepeñas arrancaba en el centro de la pista y acababa en el costado derecho para sacar uno de sus potentes tiros que ostenta como seña de identidad. El cuero entraba cerca de la escuadra y comenzaba otro partido. Los eslovenos comenzaban a dudar si salir a la presión o no en ciertas jugadas y el conjunto español siguió dominando la posesión.

Alcanzado el ecuador de la segunda parte, Juanjo sacaba en largo para Cecilio, que centraba raso tras el desborde para Borja Díaz. El jugador de Movistar Inter FS, sin embargo, no encontraría puerta y mandaría el balón directamente contra el poste. Pero España no bajaría los brazos hasta conseguir una nueva remontada ante el equipo de Horvat. Pelotazo de Chino a la red, sin ángulo, después de recoger un despeje provocado por un tiro de Raúl Gómez.

Cujec se vestiría de portero-jugador para intentar neutralizar el tanto español y se cambiaban los papeles. Esta vez los eslovenos llevaban la batuta y era el equipo de Fede Vidal el que aguantaba atrás. Pola incluso fallaría una más en el mano a mano con el portero dentro del área, pero España ya tenía el encuentro en el bolsillo y conseguía ponerse líder en solitario.