Nacidos el mismo día de estío del mismo año -1996- y ambos campeones de Europa en diferentes categorías con España.

Los caminos paralelos de Rodrigo Hernández y Mikel Merino han convergido este sábado 22 de junio en la localidad germana de Donaueschingen, donde ambos han celebrados sendos cumpleaños durante la cena de la Selección.

"Os quiero mucho a todos", ha dedicado el centrocampista madrileño a sus compañeros, pidiéndoles como uno de los capitanes que "mantengamos los pies en la tierra y sigamos con la misma humildad para que vengan cosas bonitas".

Por su parte, el navarro ha dicho sentirse "muy afortunado por lo difícil que es jugar una Eurocopa en nuestra corta carrera. Tenemos un grupo excepcional tanto en lo humano como en lo deportivo y estoy seguro que con la ética del trabajo que tenemos todo va a salir muy bien".

Un estruendoso aplauso de toda la expedición ha culminado las palabras de Mikel Merino, quien junto a todos sus compañeros emprenderá este domingo viaje hasta Düsseldorf, donde España cerrará el lunes contra Albania su participación en la fase de grupos de la Eurocopa 2024.