Cuando Unai Simón detuvo el quinto penalti de Croacia en la tanda de la final de la UEFA Nations League, los españoles que acudieron al Stadion Feijenoord estallaron de felicidad. Once años después, la Selección volvía a conquistar un título y la fiesta estaba justificada, tanto como la de los 23 internacionales de Luis de la Fuente, pletóricos en su celebración tanto en el césped como en el vestuario. Solo hay que verlo…

Música, cánticos, abrazos… Fue, sencillamente, una fiesta total con todos los jugadores unidos, el mejor secreto de esta Selección ya que todos van en la misma dirección. Ansu Fati y Yéremy Pino bailaron sin parar, Rodrigo y Unai se contagiaron de esos pasos, Jesús Navas no dejaba el trofeo… Todos celebraron a lo grande un título que supone mucho para este equipo.

El “campeones, campeones” siguió en el autobús que les devolvió al hotel, donde cenaron con una sonrisa de sonrisa, la misma que exhibieron el lunes con el emotivo acto del WiZink.