El encuentro, arbitrado por el colegiado Enrique Ortiz, fue dominado desde el principio por la Selección española sub 16 que desplegó su típico juego de toque y control. La República Checa buscó forzar errores defensivos pero la zaga española y el portero Carlos Marín lo resolvieron muy bien.

España abrió pronto el marcador gracias a un penalty sobre David González en el minuto 15, que fue transformado por el capitán Pedro Chirivella, quien ante Italia ya anotó el tercer tanto, igualmente de penalty.

Al contragolpe, aprovechando la velocidad de David González, la Selección sub-16 llevó mucho peligro, mientras que los checos buscaban disparos desde media distancia, sobre todo a través de Cerny.

En el minuto 35, de una preciosa combinación entre David Gonzalez y Pedro Chirivella, llegó el 2 a 0, obra del capitán español. Fue un gran gol, producto de una pared, y que definía muy bien lo ocurrido en el terreno de juego: España ponía el buen juego, el toque y la capacidad ofensiva, y el rival tenía mucha entrega pero sin efectividad.

Con 2-0 acabó la primera parte. En la reanudación, al contragolpe España llevó mucho peligro a través de Altamirano y Madger Antonio Gomes y la Selección sub-16 fue capaz de controlar la dinámica del partido.

En el tramo final cierta relajación española, sabiéndose superior, provocó que Cerny pudiera anotar un gol en el minuto 38. Incluso, Cerny pudo lograr el empate con un remate al palo, pero al final la victoria fue para el equipo de Santi Denia.

En el otro partido Italia se impuso por 3 a 2 a Francia con lo que España ganado el martes se adjudica este torneo. El martes, el duelo con Francia cierra el torneo para la Selección.